Chalet independiente con vistas al mar en las colinas de Corsanico, Massarosa
Situado en el característico pueblo medieval de Corsanico, una aldea de la ladera de Massarosa, ofrecemos esta hermosa casa independiente con vistas al mar, justo entre la histórica ciudad de Lucca y las animadas playas de Versilia. Accesible a través de una puerta de entrada automática, frente a nosotros la propiedad se abre con un patio delantero con jardín, donde encontramos 2 plazas de aparcamiento y una pequeña veranda que da acceso independiente al sótano.
Subiendo a la primera planta por una escalera exterior, llegamos a la maravillosa terraza, perfecta para cenas de verano y aperitivos en compañía, donde podemos disfrutar de la impresionante vista del mar y las montañas circundantes. Entrando, para darnos la bienvenida está la zona de estar, muy luminosa y con un gran ventanal que permite admirar el mar también desde el interior.
A la derecha encontramos la cocina-comedor, de estilo rústico en ladrillo visto, con acceso a una pequeña terraza con vistas a la parte trasera de la vivienda. Continuando por el pasillo encontramos el amplio cuarto de baño completo con ducha, el gran dormitorio de matrimonio y un dormitorio mediano en el que caben cómodamente dos camas individuales. Subiendo a la primera planta abuhardillada encontramos un amplio dormitorio de matrimonio, un cuarto de armarios y un cuarto de baño completo con ducha.
Para hacer el conjunto aún más espectacular tenemos una terraza a la que accedemos directamente desde el ático, cubierta de toda vista y perfecta para tomar el sol con total privacidad sin dejar de disfrutar de la exclusiva vista de la costa y las islas del mar Tirreno. Volviendo a la primera planta, encontramos una escalera interior que nos lleva al sótano, donde tenemos un gran espacio diáfano con salón, muy luminoso, y cocina, un gran baño completo, un gran dormitorio doble y un dormitorio mediano.
En la parte trasera encontramos en cambio una zona exterior utilizada como lavadero. Dado que el sótano tiene entrada independiente, directamente desde el precioso porche perfecto para comer al aire libre, es posible dividir la casa y que cada uno tenga su propia intimidad e independencia. Situada en una zona tranquila, inmersa en el monte pero cerca de todos los servicios así como a pocos kilómetros del mar, esta casa es perfecta tanto para quien busca una primera vivienda para vivir todo el año, como inversión para alquileres cortos ya que en los periodos estivales ya se utiliza para esta actividad.
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